Ejemplo de cómo se juega el #Charliecharliechallenge
A través del tiempo, y ahora gracias a las redes sociales, hemos sabido de diversos juegos como el “Ice Bucket Challenge”, pasando por el “cinnamon challenge”, e incluso el tan peligroso “fire challenge“. Pero, lo nuevo ahora es el #Charliecharliechallenge.
Este nuevo reto, o fenómeno en las redes sociales, trata de una “ouija” fabricada con cosas que cualquier persona puede encontrar: lápices y un pedazo de papel.
A continuación, en la hoja se traza una cruz en la que escribirás dos veces “sí” y dos veces la palabra “no”. Tal y como se muestra en la siguiente imagen.
Ejemplo de cómo se juega el #Charliecharliechallenge
Las reglas del juego dicen que debes de poner los dos lápices, uno sobre el otro en forma de cruz y preguntar “Charlie are you here” (Charlie, ¿estás aquí?). Según varios vídeos que ya podemos ver en YouTube, Vine, Instagram, Twitter y demás redes sociales, uno de los lápices, el de arriba, comienza a moverse por sí solo.
Una vez que Charlie haya afirmado que sí se encuentra en donde estás, se procede a realizar más preguntas, claro, todas ellas dejando sólo para responder “sí” o “no”.
Para terminar la sesión, o el juego, hay que decir “Charlie, can we stop?” (Charlie, ¿podemos terminar?).
Hasta el momento, este juego es bastante viral en todas las redes sociales y nos recuerda a uno llamado “Willy”, en el que dos personas, con lápices o plumas en las manos, las juntaban en forma paralela y de ahí realizaban una serie de preguntas.
Demostración de cómo se jugaba “Willy”.- Foto de Megamedia
Las respuestas eran igual “sí” o “no”, dependiendo si los lápices se cerraban o abrían, según sea la regla que convenían previo al juego.
Este juego, que ya es tendencia en Estados Unidos, incluso ha tenido muchas críticas, ya que expresan que se trata de una broma de gente que, definitivamente, no tiene nada qué hacer.
Por otro lado, hay quienes no se atreven a jugarlo por temor a lo desconocido. Incluso, en algunos foros han dicho que este juego, al realizarse con lápices, estos se mueven debido a una propiedad magnética del grafito
